El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático o Panel Intergubernamental del Cambio Climático, conocido por el acrónimo en inglés IPCC (Intergovernmental Panel on Climate Change), es una organización internacional, constituida a petición de los gobiernos miembros. Fue establecido por primera vez en 1988 por dos organizaciones de Naciones Unidas, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), y posteriormente ratificada por la Asamblea General de las Naciones Unidas mediante la Resolución 43/53. Su misión es proveer con evaluaciones científicas comprensivas sobre la información científica, técnica y socioeconómica actual sobre el riesgo de cambio climático provocado por la actividad humana, sus potenciales consecuencias medioambientales y socioeconómicas, y las posibles opciones para adaptarse a esas consecuencias o mitigar sus efectos. Está presidido por Rajendra K. Pachauri.
Este es uno de los grupos que se preocupa por nuestro mundo y por lo tanto por nosotros. Debería haber muchos más como ellos.
Página en español: http://www.ipcc.ch/home_languages_main_spanish.shtml
Fuentes: Wikipedia.org
Cambio climático: Efectos sobre el ecosistema
Somos estudiantes del colegio La Salle de 4to año en la especialidad de Ciencias Naturales.
El objetivo de este blog es concientizar a las personas sobre los efectos del cambio climático en nuestro planeta.
miércoles, 19 de noviembre de 2014
martes, 18 de noviembre de 2014
Plagas y enfermedades
Los peligros que el cambio climático supone para la salud son de naturaleza diversa y mundial, y van desde el aumento del riesgo de fenómenos meteorológicos extremos hasta modificaciones de la dinámica de las enfermedades infecciosas. Muchas de las enfermedades más mortíferas son sensibles a las condiciones climáticas, de las que dependen su incidencia y propagación.
Algunas de las repercusiones sanitarias del cambio climático ya son manifiestas: aumento del número de muertos por olas de calor, variaciones de la incidencia de enfermedades transmitidas por vectores y alteraciones de la distribución de los desastres naturales.
El calentamiento global favorece la transmisión de patógenos, los cuales son los principales detonadores de enfermedades como:
La Organización Mundial de la Salud (OMS) detalla que con el cambio climáticose ha incrementado el número de muertos por olas de calor e inundaciones. No obstante, señala que los efectos son más notorios en las poblaciones vulnerables como jóvenes, adultos mayores y quienes padezcan ya alguna enfermedad.
Las repercusiones sanitarias del cambio climático serán difícilmente reversibles en años o decenios. No obstante, muchas de esas posibles repercusiones son evitables o controlables. Hay medidas definidas en el sector sanitario y sectores conexos para reducir la exposición al cambio climático y sus efectos. Por ejemplo, el control de los vectores de enfermedades, la reducción de la contaminación producida por los medios de transporte y el uso eficiente de la tierra y el agua son medidas bien conocidas de utilidad demostrada.
Algunas de las repercusiones sanitarias del cambio climático ya son manifiestas: aumento del número de muertos por olas de calor, variaciones de la incidencia de enfermedades transmitidas por vectores y alteraciones de la distribución de los desastres naturales.
El calentamiento global favorece la transmisión de patógenos, los cuales son los principales detonadores de enfermedades como:
- Dengue
- Paludismo o malaria
- Cólera
- Diarrea
- Desnutrición
- Estrés térmico
- Hipotermia
- Asma
- Tracoma (infección ocular que causa ceguera)
- Enfermedades cardiacas y respiratorias

La Organización Mundial de la Salud (OMS) detalla que con el cambio climáticose ha incrementado el número de muertos por olas de calor e inundaciones. No obstante, señala que los efectos son más notorios en las poblaciones vulnerables como jóvenes, adultos mayores y quienes padezcan ya alguna enfermedad.
Las repercusiones sanitarias del cambio climático serán difícilmente reversibles en años o decenios. No obstante, muchas de esas posibles repercusiones son evitables o controlables. Hay medidas definidas en el sector sanitario y sectores conexos para reducir la exposición al cambio climático y sus efectos. Por ejemplo, el control de los vectores de enfermedades, la reducción de la contaminación producida por los medios de transporte y el uso eficiente de la tierra y el agua son medidas bien conocidas de utilidad demostrada.
Fuente: http://www.who.int/es/
¿Cómo prevenir el cambio climático?
Sabemos que lo necesario para detener el cambio climático debería ser la aplicación de políticas ambientales a nivel mundial de reducción de gases de efecto invernadero, pero desde tu lugar podés aportar con algunos actos:
1. Cambiá las bombillas
Reemplazar una bombilla tradicional por una de bajo consumo ahorra más de 45 kilogramos de dióxido de carbono al año.
2. Apaga la tele y el PC
Sólo con apagar la televisión, el DVD o el ordenador cuando no estén en uso evitarás que miles de kilos de CO2 salgan a la atmósfera. No dejes los aparatos eléctricos en stand-by (espera): un televisor que permanece encendido durante tres horas al día (la media que los europeos ven la tele) y en stand-by las 21 horas restantes consumirá un 40 por ciento de la energía total en el modo de espera.
No dejes el cargador de tu móvil enchufado todo el tiempo, aunque no esté conectado al teléfono, porque seguirá consumiendo electricidad.
3. Conducí menos
Andar a pie, usar la bicicleta, usar el transporte público. Ahorrás 30 gramos de CO2 por cada 4,5 kilómetros que no conduzcas. Por cada litro de combustible que quema el motor de un auto, se libera una media de 2,5 kilos de CO2.
4. Revisá los neumáticos
Si la presión de tus neumáticos baja 0,5 bares, tu auto consumirá un 2,5 por ciento más de combustible y, por tanto, liberará un 2,5 por ciento más de CO2. El ahorro de cuatro litros de gasolina evita la emisión de seis kilos de dióxido de carbono.
5. Reciclá
Podés ahorrar más de 730 kilos de CO2 al año al reciclar la mitad de la basura que se produce en tu casa.
6. Evitá mucho embalaje
Elegí productos con poco envase: una botela de 1,5 litros genera menos residuos que tres de medio litro. En la compra usa bolsas reutilizables. Podés evitar la emisión de 1.100 kilos de CO2 si reduces tu basura un 10 por ciento.
7. Menos agua caliente
Lava con agua fría o tibia y ahorrarás 150 kilos de CO2. Ahorrás agua caliente y gastás cuatro veces menos energía si en vez de un baño te das una ducha. Cerrá la canilla mientras te lavás los dientes. Asegurate de que tus canillas no gotean: el goteo de una puede hacer perder en un mes el agua suficiente para llenar una bañadera.
8. Vigilá los electrodomésticos
Tapar la cazuela mientras cocinás es un modo de ahorrar mucha energía. Aún mejor son las ollas a presión y las vaporeras, que ahorran un 70 por ciento de energía.
Usá el lavarropas y el lavavajillas sólo cuando estén llenos. Si no lo están, usa programas económicos. No pongas en la heladera alimentos calientes o templados; ahorrás energía si dejás que se enfríen primero.
9. Ajustá el termostato
La oscilación de dos grados centígrados en invierno y en verano ahorra más de 600 kilos de dióxido de carbono por hogar en un solo año. Bajar la temperatura un grado puede reducir la factura de la calefacción entre un 5 y un 10 por ciento. Cuando ventiles tu casa, abrí las ventanas unos minutos, no dejes escapar el calor mucho tiempo.
Aislá bien tu casa. No abuses de los aparatos de aire acondicionado, consumen mucha energía y emiten unos 650 gramos de CO2.
10. Planta un árbol
Un solo árbol absorbe una tonelada de dióxido de carbono durante toda su vida.
Fuente: http://www.cambioclimatico.org/contenido/10-medidas-concretas-para-ayudar-frenar-el-cambio-climatico
1. Cambiá las bombillas
Reemplazar una bombilla tradicional por una de bajo consumo ahorra más de 45 kilogramos de dióxido de carbono al año.
2. Apaga la tele y el PC
Sólo con apagar la televisión, el DVD o el ordenador cuando no estén en uso evitarás que miles de kilos de CO2 salgan a la atmósfera. No dejes los aparatos eléctricos en stand-by (espera): un televisor que permanece encendido durante tres horas al día (la media que los europeos ven la tele) y en stand-by las 21 horas restantes consumirá un 40 por ciento de la energía total en el modo de espera.
No dejes el cargador de tu móvil enchufado todo el tiempo, aunque no esté conectado al teléfono, porque seguirá consumiendo electricidad.
3. Conducí menos
Andar a pie, usar la bicicleta, usar el transporte público. Ahorrás 30 gramos de CO2 por cada 4,5 kilómetros que no conduzcas. Por cada litro de combustible que quema el motor de un auto, se libera una media de 2,5 kilos de CO2.
4. Revisá los neumáticos
Si la presión de tus neumáticos baja 0,5 bares, tu auto consumirá un 2,5 por ciento más de combustible y, por tanto, liberará un 2,5 por ciento más de CO2. El ahorro de cuatro litros de gasolina evita la emisión de seis kilos de dióxido de carbono.
5. Reciclá
Podés ahorrar más de 730 kilos de CO2 al año al reciclar la mitad de la basura que se produce en tu casa.
6. Evitá mucho embalaje
Elegí productos con poco envase: una botela de 1,5 litros genera menos residuos que tres de medio litro. En la compra usa bolsas reutilizables. Podés evitar la emisión de 1.100 kilos de CO2 si reduces tu basura un 10 por ciento.
7. Menos agua caliente
Lava con agua fría o tibia y ahorrarás 150 kilos de CO2. Ahorrás agua caliente y gastás cuatro veces menos energía si en vez de un baño te das una ducha. Cerrá la canilla mientras te lavás los dientes. Asegurate de que tus canillas no gotean: el goteo de una puede hacer perder en un mes el agua suficiente para llenar una bañadera.
8. Vigilá los electrodomésticos
Tapar la cazuela mientras cocinás es un modo de ahorrar mucha energía. Aún mejor son las ollas a presión y las vaporeras, que ahorran un 70 por ciento de energía.
Usá el lavarropas y el lavavajillas sólo cuando estén llenos. Si no lo están, usa programas económicos. No pongas en la heladera alimentos calientes o templados; ahorrás energía si dejás que se enfríen primero.
9. Ajustá el termostato
La oscilación de dos grados centígrados en invierno y en verano ahorra más de 600 kilos de dióxido de carbono por hogar en un solo año. Bajar la temperatura un grado puede reducir la factura de la calefacción entre un 5 y un 10 por ciento. Cuando ventiles tu casa, abrí las ventanas unos minutos, no dejes escapar el calor mucho tiempo.
Aislá bien tu casa. No abuses de los aparatos de aire acondicionado, consumen mucha energía y emiten unos 650 gramos de CO2.
10. Planta un árbol
Un solo árbol absorbe una tonelada de dióxido de carbono durante toda su vida.
Fuente: http://www.cambioclimatico.org/contenido/10-medidas-concretas-para-ayudar-frenar-el-cambio-climatico
Fauna
El cambio climático afecta a la flora y fauna de todo hábitat que sufra su impacto. En concreto, repercute en la distribución de los animales, así como a su reproducción y a otras características de su ciclo de vida, provocando cambios importantes en los ecosistemas y una serie de transformaciones que les afectan al tiempo que acaban ocasionando problemas de unos a otros. Como consecuencia de esto, los animales se ven obligados a adaptarse a los cambios, o en su defecto, morir.
El clima cambia a un ritmo sin precedentes y no todos los animales se pueden adaptar a tiempo.

Otro ejemplo es el Tigre de Bengala, ubicado principalmente en los manglares ubicados entre Bangladesh y la India. Cada año el crecimiento del nivel del mar es de 4 milímetros, se prevé que para el 2060 el hábitat de estos animales estará destruido y como consecuencia desaparecerán el 70% de los Tigres de Bengala.
Los canguros, por su parte, viven únicamente en Australia. El incremento de la temperatura y la sequía por falta de lluvia son las consecuencias del cambio climático que afrontará este país. Los canguros y otras especies de su familia están en gran riesgo de extinción, las altas temperaturas producen incendios forestales que acaban con gran parte de las especies salvajes.
Igualmente, el aumento global de las temperaturas hace que se colonicen áreas, es decir, que se conquisten nuevas regiones, bien sea por la huida del hábitat donde se encontraban o porque las nuevas condiciones climáticas permiten su expansión a nuevos lugares.
De este modo, la llegada de nuevas especies a nuevos lugares por migraciones provocadas por el cambio climático pueden ocasionar el declive de muchas especies nativas.
Otro ejemplo ilustrativo sería el carbonero común; un pequeño pájaro de colores vivos, habita buena parte de Europa y Asia. Es una ave muy extendida y sedentaria (no emigra). A pesar de que su población es grande y está extendida por muchísimos países, no está a salvo de la influencia del cambio climático. El sistema climáticopuede influir en la vida de los animales de manera indirecta y causar su extinción.

La clave está en unas orugas con las que los carboneros comunes alimentan a sus crías. Estas orugas sólo están en esa forma (antes de convertirse en polillas) durante unas semanas. Como la temperaturadel planeta aumenta, la metamorfosis, la transformación de oruga a polilla, cada año ocurre antes.
El problema es que el carbonero ha adaptado su ciclo vital al de las orugas y cría cuando se supone que la naturaleza le va a proveer de alimento para sus polluelos. Lo que ahora se preguntan los científicos es si esta ave será capaz de adaptarse al clima y poner huevos antes.
Lo que nos preguntamos ahora es, ¿podrán los animales adaptarse al cambio climático o tendrán que sufrir extinciones?
Fuentes:
- http://www.biopedia.com/cambio-climatico/
- http://climaticocambio.com/
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